
Realizar una preboda es saborear el amor en estado puro, es saborearlo en uno de los momentos más álgidos de la relación, y eso se nota y eso lo disfruto.
Poder realizar una preboda a esta pareja (Corentin & Gemma) aumenta aun más el nivel de satisfacción. Las miradas, los gestos, la complicidad y la compenetración que hay entre ellos es algo verdaderamente asombroso… pero si además de todo ello, le sumamos que esta Preboda la realizamos en PARÍS, el resultado ya es algo maravilloso.
Nos esperaba un día típico parisino, día gris con un poco de lluvia a primera hora, pero esta ciudad es tan apasionante, que hasta un día nublado PARÍS te lo transforma en un día romántico. Muy romántico.
Merci Beaucoup Corentin.
Merci Beaucoup Gemma.
Y por supuesto, no me pude resistir a perderme de noche por las calles esta ciudad …